Qué es mejor?
Cuando se trata de inversión inmobiliaria, surge una cuestión delicada:
¿Es preferible apostar por una ubicación consolidada con menor rentabilidad pero gran potencial de revalorización del inmueble, o invertir en una zona más asequible con mayor rentabilidad, aunque con un crecimiento más moderado del valor del inmueble?
Ambas opciones tienen ventajas y desventajas, y la elección depende en gran medida del perfil del inversor.
Rentabilidad vs. Revalorización
En áreas premium, donde los precios de los inmuebles pueden ser a partir de los 300.000€, y cuya rentabilidad neta media por alquiler puede rondar el 4% neto.
Sin embargo, estos activos tienden a ganar mayor valor en proporción con el tiempo, lo que los convierte en una apuesta segura para aquellos que buscan estabilidad y crecimiento patrimonial a largo plazo.
Por otro lado, en barrios más modestos, donde es posible adquirir propiedades por unos 80.000€, la rentabilidad neta del alquiler suele superar el 8%, pero con una menor revalorización porcentual del inmueble
Qué opción es mejor?
✔️ Inversores patrimonialistas y conservadores
Buscan seguridad y crecimiento estable, por lo que prefieren ubicaciones prime donde la plusvalía a largo plazo es más predecible.
✔️ Inversores orientados a generar ingresos mensuales
Priorizan la rentabilidad, por lo que se inclinan por zonas con precios accesibles y alta rentabilidad bruta, aunque asuman un mayor riesgo en términos de estabilidad de la inversión.
Si tu objetivo es hacer crecer tu patrimonio, la rentabilidad debe ser tu prioritaria.
En cambio, si tu objetivo es preservar tu patrimonio, la seguridad y la revalorización del inmueble es una opción más atractiva.
Cada estrategia tiene su lugar en el mundo de la inversión inmobiliaria.
¿Cuál se ajusta más a tu perfil?
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